El cuidado en el domicilio es uno de los preferidos tanto para familiares como para las personas mayores gracias a que ofrece comodidad, confianza y seguridad al permitir que nuestro ser querido siga rodeado de las cosas que atesora y a las que les da valor.

Algunos de los beneficios que tiene el cuidado en el hogar es la asistencia controlada y personal del paciente es decir, que la persona tiene la posibilidad de decidir, quién, cómo, cuándo y qué necesita en todo momento, además, si el tipo de cuidado que se brinda se da con las medidas necesarias y profesionalismo en la atención, traerá muchos más beneficios que van más allá del hecho de evitar accidentes o el sentimiento de soledad. Por ejemplo, el asistente personal será las manos y las piernas del usuario en las tareas que él no pueda realizar, pero siempre serán él o sus familiares los que tomen las decisiones más importantes sobre el cuidado que recibe. 

Los servicios que pueden ofrecerse en espacios domésticos, pueden ir de pocas horas hasta las 24 horas del día y suelen ser flexibles y adaptables. Actualmente, el más demandado por los clientes es el servicio de guardias prolongadas, en el que la trabajadora habita por varias semanas en la misma casa del usuario y se encarga de diversas tareas: la medicación, el vestido, las comidas, la limpieza y sanitización de los espacios de cuidado, las salidas de gestiones y otras actividades de ocio dependiendo de sus necesidades. 

Beneficios apreciados por las personas mayores cuando son cuidados en sus domicilios

1. Elegir quién maneja tu cuerpo, quién te baña y quién te asiste: las residencias colocan a las personas mayores en una mayor situación de vulnerabilidad, pues no pueden elegir ni la hora y ni por quién serán asistidos.
2. A las personas mayores les gusta estar en su casa: especialmente valoran su barrio, sus cosas, sus muebles y todo aquello que aman de su espacio. Ser cuidados en sus domicilios agrega gran valor y bienestar a sus vidas.
3. Es un trato personal y muy familiar en el hogar, a pesar de que las residencias suelen ser espacios en donde se comparte el espacio con mucha gente, en ocasiones suelen sentirse solas pues el trato suele ser generalizado.
4. El estado de ánimo de la persona mayor mejora:  el cuidado y, sobre todo, la compañía de un cuidador, ayudarán a que la persona mayor se sienta mucho mejor anímicamente y sea más feliz.
5. Aumento de la esperanza de vida: al estar en su propio entorno y rodeado de personas de confianza, hará que la persona mayor se sienta acompañada y perciba que no está sola, por lo que se evitarán problemas como la depresión. 
6. Mejora de la calidad de vida de toda la familia: tener a un familiar dependiente y combinar su cuidado con los quehaceres diarios y las ocupaciones cotidianas es un trabajo agotador; tener un soporte con personal de cuidado capacitado, con experiencia y sensibilidad, sin duda será un gran apoyo para la persona mayor y toda su familia.